¿Cómo de importante crees que es la personalidad de tu marca?
En el Siglo XXI, en plena Era de la globalización, el crecimiento del e-commerce ha superado la convivencia entre tiendas físicas y virtuales. En este panorama, el equilibrio tradicional entre producto y precio como elemento diferenciador ya no es suficiente; la marca es ahora el vehículo para posicionarse y permitir que el precio no sea el factor determinante en la decisión de compra. Por ello, la comunicación se erige como una herramienta clave para destacar.
Los consumidores de esta era no solo buscan productos, sino también marcas con un propósito. Son selectivos y empiezan a asociar sus compras a proyectos con los que se identifican. Más allá de meros conceptos, la percepción real del cumplimiento de valores es un factor muy importante para cautivar a la audiencia. La marca debe representar valores que realmente formen parte de su ADN, debe ser auténtica.
En este punto, es donde cobra importancia el branding, definido como la construcción y gestión de la percepción pública sobre una marca, implica la creación de una identidad distintiva que sobresalga entre la multitud.
Los elementos del branding son:
1.Logotipo y Diseño: un ejemplo notable es el icónico logotipo de Apple. Su diseño minimalista refleja innovación y simplicidad, valores fundamentales para la marca.
2. Narrativa de la Marca: Nike no solo vende zapatillas; vende el espíritu de superación personal. Su narrativa poderosa impulsa el branding más allá del producto. El claim de NIke «JUST DO IT» es una filosofía que ha logrado cautivar a miles de personas alrededor del mundo.
3. Experiencia del Cliente: Starbucks ha logrado convertir la simple compra de café en una experiencia de marca. Desde el aroma hasta el servicio, cada detalle contribuye a su fuerte branding. El ejemplo perfecto de esta experiencia es la tienda que tiene la marca en Milán.
Siendo Italia uno de los países con mayor tradición cafetera del mundo, Starbucks logró posicionarse y comunicar su oferta de valor, al hacer de de su tienda un espacio donde poder apreciar todo el proceso del café. Esta experiencia se encuentra recogida en un ambiente inspirado en las antiguas fábricas de café, donde el centro de atención es una tostadora de café industrial, de la que los baristas más especializados extraen el café con el que hacen las famosas bebidas de la marca.
Es crucial reconocer que, a lo largo de la evolución de cualquier empresa, surgirán momentos en los que la reconstrucción del branding sea indispensable. Este proceso, lejos de ser un obstáculo, constituye una etapa natural en la vida de toda marca. La verdadera importancia no radica simplemente en perdurar, sino en transformarse en una marca que vende de manera impactante y sigue formando parte activa de la vida de las personas.
El branding revitaliza la esencia de la marca
Adaptándola a las cambiantes expectativas del mercado. En estos momentos de transformación, surge la oportunidad de destacar, de narrar una historia fresca y cautivadora que resuene con la audiencia.